América Latina ocupa el cuarto lugar en producción de residuos plásticos a nivel mundial, de acuerdo con una estimación hecha por la WWF. Es ahí donde ya existen soluciones para promover desde hoy un futuro en donde manejemos mejor los plásticos.
De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) la producción de residuos plásticos se duplicó en los últimos 20 años, alcanzando las 350 toneladas por año; sin embargo, en el mundo y México ya hay herramientas para contrarrestar un futuro plastificado.
Alrededor del mundo se están tomando iniciativas para utilizar la tecnología como una aliada en la lucha contra la contaminación plástica.
En el caso de México, donde el consumo de plástico es de 5.9 millones de toneladas al año, de acuerdo con datos de la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (ANIPAC), la asociación civil Ecología y Compromiso Empresarial (ECOCE) apunta que hoy en día se recuperan seis de cada 10 envases de PET en el país y que se gestionan (en su caso) el 45% de los empaques flexibles enviados al mercado por sus empresas asociadas.
Aunque en el país existen legislaciones puntuales respecto al manejo de residuos y se están viendo resultados favorables en la recuperación y reciclaje de PET, aún falta mucho por hacer para mejorar el manejo de todos los residuos dentro del país, pues es necesario tener una infraestructura más adecuada para la gestión y disposición de residuos plásticos.
Y es aquí donde la tecnología tiene un rol fundamental, sobre todo en la transición de las empresas hacia la sostenibilidad. Tecnologías como el Software as a Service (SaaS), la red 5G, internet de las cosas (IoT), Big Data, inteligencia artificial (IA) y blockchain podrían marcar la diferencia en la protección del medio ambiente a través de la gestión de diferentes indicadores de sostenibilidad, la huella plástica y las emisiones incluidas.
Con estos sistemas de gestión se pueden establecer políticas y planes de clasificación, separación y disposición final de residuos.
Un ejemplo de esto es la empresa de software Beeok, que en colaboración de la consultora mexicana de sostenibilidad Green Tank tomaron la iniciativa de desarrollar e implementar una herramienta tecnológica para gestionar los desechos plásticos y la emisión de gases con la finalidad de evitar que estos acaben en los mares y el aire. «
Es una campaña de transmisión del conocimiento y propuestas de soluciones para disminuir el impacto de la contaminación por plásticos en la CDMX.